jueves, 18 de octubre de 2012

Instantánea


Chano Castaño

   La realidad cuántica, la realidad poética, la realidad. Mundos simultáneos, mundo uno. Rosquillas de estrellas, café lácteo y pompones de chocolate por el astrolábio. Bajo los ojos no hay demasiada profundidad pues en parte nuestro límite es la espalda, y por otro lado somos infinitos. Foráneos, seguros, meros átomos en movimiento. Despido con un abrazo la probabilidad de ser un desgraciado porque no basta con darle una sonrisa a esto el día entero. Hay que ser planta, mico, cigüeña, la bala que la mano ataja, al pájaro que en la noche trina. La realidad no depende de la película, hay muchos rollos sin edición y guiones firmados en la antesala de cada amanecer. Somos más que eso. Olvido, perplejidad, soledad. Sí, sobretodo lo último. Nuestro cuerpo, nuestra cueva llena de osos en siesta, de tigres sin rayas, de selva fantasmal y ciudades que se derrumban en el abismo del ombligo. Fuego, dijo el capitán. Más duro, más duro, afirmó la gitana en el vendaval. Yo no digo algo de lo que me pueda arrepentir. Simplemente escribo instantáneas donde todo es eternidad. 

2 comentarios:

  1. Dejame ver si comprendi... cuando escribe instantáneas la realidad momentanea tornase eterna? Puede ser porque se quedan registradas para el futuro acordar el pasado... Que magia! La simple, adimirable y notable magia de escribir.

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    1. Las instantáneas son momentos que le robo al paso de ese monstruo que es el tiempo. Pellizcos de turbulencia y vida.

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