viernes, 27 de enero de 2012

Linterna Verde y el mal del bien


Por Chano Castaño

Linterna Verde es uno de los héroes de Detective Comics (DC) que más prestigio ha tenido a costillas de otros. Primero fue con Green Arrow, o Flecha Verde, quien era el segundón de la pareja. Linterna Verde lo proveía de saetas y el otro disparaba sin cesar, atolondradamente, atinaba cuando la suerte y el coraje lo querían salvar de la muerte, y siempre llegaba en el momento definitivo, cuando se decide si esto continua o no. 
   Linterna Verde luego le sobó chaqueta a la Liga de la Justicia y todos sus tertulios. Oliendo perico incautado y fumando macoña del jardín, Batman, Superman y Acuaman hacían de las suyas, privando lo privado y dejando al resto atrás. El primer Linterna Verde real, no ese falso chamán al que llaman Alan Scott, era un completo idiota. Sí, es hal Jordan, el tarado que aparece en la película que salió en 2011. Una grosería para la inteligencia, una barbaridad para la actuación, en fin, un bisoño insoportable este tipo. En el comic es igual, desabrido, predecible, lleno de males, de errores, pero resulta que es el bien. El mal del bien. 


   Me encanta el Green Lantern Corps, ese inmenso ejército de guardianes que cuidan sectores del infinito espacio. Me encantan los enanos azules que funden los anillos y escriben y re-escriben un libro mágico y poderoso, como si de eso dependiera el porvenir del todo. Me gusta que los marcianos den asco, que sean babosos y ojones con narices deformes, que se llamen de una manera inpronunciable y que estén enjutados en esas trusas delgadas. El Cuerpo de Linternas Verdes es un cannibal jaw que se traga lo que se atraviece, no respetan las reglas siempre (por eso deben re-escribir el libro) y, cosa rara, hay seres humanos metidos allí. Fueron de la última especie que aceptaron por creerlos muy involucionados, lentos, brutos y sin valor. Unos mugres. Todo eso me parece fascinante y el niño que todavía enciende luces en mi memoria se llena de alegría cuando ve a Linterna Verde. 
   Pero anda que hacerle.
   Linterna Verde es un mal pintado de mucho bien.
   Enumeraré las razones por las que así es.

1. Hal Jordan, el primer Linterna Verde, es un piloto sin conciencia, un idiota sin educación, el típico modelo de abusón de escuela secundaria que sale con las chicas de las porras. Un bobalicón. 

2. Linterna Verde es un comic netamente norteamericano. Aunque la cultura de los tebeos es inmensa y grandiosa por el trabajo de los gringos, la historia de Lineterna Verde vino a globalizarse hasta hace muy poco y sus conflictos están mediados por una especia de OTAN de los superhéroes. Quisiera que Linterna Verde estuviera luchando en las favelas del Brasil o en las comunas colombianas. Estos super héroes ganarían adeptos si sacaran plagas de otro lado. 

3. No hay nada más guiso que el anillo de linterna verde. Es un orgullo de Victor Carranza, quien bajo cuerda trabaja para los enanos azules que hacen los anillos. Una legión intergaláctica del mal.
4. Linterna Verde ha evolucionado. De ser un piloto idiota pasó a ser un profesor lleno de ira, luego un arquitecto sofisticado y finalmente un artista. Algo de Nietzsche tiene todo esto. ¿Si puede hacer increíbles prodigios juntando el talento de su mente con el poder del anillo, que no podría hacer un artista? Pues para sorpresa de todos, quien debería impresionar más y caer en crísis más interesantes humanamente hablando, es quien ha sido el Linterna Verde más simple y vano que ha pasado por el anillo. 

5. Los diálogos de todos los héroes de la Liga de la Justicia son mentirosos. La gente no habla con tanta bondad ni es tan inocente. Tampoco piden tanta ayuda en público y menos, mucho menos, creen que el heroismo exista. Los países que ganaron la guerra pudieron sostener esta mentiras algunos años, pero sabemos que los héroes murieron hace mucho rato. La última vida se la gastó Neo en Matrix. 

6. Linterna Verde finalmente es un ser humano. Tiene errores, maldad, locura, ansiedad y mucha inestabilidad en sus entrañas. Lo corroe el hedonismo y la indisciplina. El sexo lo cambia como un efecto bipolar y sus elucubraciones y ensueños, el supuesto insumo del anillo del poder, apenas llegan a ser fantasías de violencia y oscuridad, de vértigo y luz. Linterna Verde es una lampara. El mundo de los comics lo sabe pero comen callados. Los enanos azules podrían re-escribir el libro.

1 comentario:

  1. En el día más brillante, en la noche más oscura,
    ningun mal escapará a mi vista.
    Que aquellos que adoran el poder del mal,
    Que teman a mi poder… ¡la luz de Maria Ximena Laverdeeeee!

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